Sabes que la quieres cuando tu primer y último pensamiento del día es ella
cuando revisas vuestras fotos y lloras,
cuando le escribes versos y cantas,
y cuando le robas cada segundo al reloj por estar con ella.
Sabes que la quieres cuando al verla solo sonríes,
cuando sin pensarlo haces locuras,
cuando te separas de ella y te quedas vacío,
y cuando la dibujas a cada instante.
Sabes que la quieres porque el tiempo con ella vuela,
porque tu cuerpo se estremece con su caricia,
porque el sexo es sentimiento puro,
y porque sus risas silencian el mundo.
Sabes que la quieres cuando la miras dormir y te emocionas,
cuando sus abrazos no te dejan respirar,
cuando los atardeceres no solo queman el cielo sino tu corazón,
y cuando cada lugar te recuerda a ella.
Sabes que la quieres cuando tu próximo hito es verla,
cuando sueñas con ella y lo recuerdas,
cuando vuestras lágrimas se mezclan ,
y cuando sólo te salen palabras de amor.
Sabes que la quieres porque quieres que sea feliz,
porque te entiende y te conoce,
porque los detalles no son esfuerzos sino que salen solos,
y porque tus ojos se cristalizan en las despedidas.
Sabes que la quieres porque sencillamente, lo sabes.